Ana en la escuela

Hace unos días Anita empezó a ir a la escuela. Es un maternal donde estará unas pocas horas al día, tres o cuatro cada día, para que empiece su formación formal como miembro de una sociedad mas grande que su familia que tanto la adora.

El colegio se llama “Petite Ecole” y queda en los Altos Mirandinos, en una zona llamada Llano Alto. Queda relativamente cerca de la casa, a unos 10 kilómetros mas o menos, y a poco mas de un kilómetro de casa de los abuelos. Buscamos ese colegio precisamente por la cercanía a los abuelos, porque, en el caso de que Ingrid consiga un empleo en Venezuela, serían ellos los encargados de ir a recoger a Ana.

Por las razones que ya saben y que no pienso repetir, no pude estar presente en el primer día de escuela de Ana. Valga la aclaratoria que la palabra escuela la estoy usando en el sentido mas amplio que se puedan imaginar. Es básicamente un preescolar/maternal, donde los niños pasan el tiempo entre juegos y alguna que otra actividad educativa. No esperamos que a esta altura de su corta edad le enseñen a leer y escribir, pero deberá aprender a compartir juguetes, a pintar con los dedos y a tener un poco de disciplina. Los juegos en estas escuelas están diseñados para que los niños aprendan un poco de habilidades motoras y también sociales.

Decía que no pude acompañar a mi hija en su primer día de escuela, y eso me tiene mal. No la vi el primer día con su uniforme. Sólo me la puedo imaginar en la larga distancia, caminando de la mano de mami, con su paso lento, mirando todo mientras camina, con su corazoncito acelerado por la novedad, pero sintiéndose segura porque mami la protege. Me la imagino entrando al colegio, donde ya hay otros niños que tienen mas tiempo que ella, aferrando con mas fuerza la mano de Ingrid mientras el miedo a lo desconocido crece en ella. Si cierro los ojos puedo ver a Ingrid presentándosela a la maestra que la recibe, ella tomándola de la mano y llevándola al salón de clases, mientras mami se queda con el corazón apretado, aguantando las lágrimas mientras Ana se aleja con la maestra sin poder contener las suyas. Es difícil imaginar lo que Ana ha pensado en ese instante, tal vez se sienta olvidada o traicionada, sabe que no va a estar con su mamá durante un rato, un rato que no sabe cuanto va a durar, sólo deseando que sea un lapso corto.

Supe por Ingrid que Ana lloró bastante ese día, y cada uno de los días de esta semana ha llorado al quedarse en el colegio. Al rato se calma, las maestras le tienen paciencia y cariño y poco a poco Ana empieza a ceder y a acostumbrarse al sitio y a los compañeritos. Han pasado apenas unos días desde que comenzó y ya Ana está diferente. Ahora está mas despierta, empieza a compartir mas, a pesar de estar en la fase infantil de “No, no, no”, que realmente suena como “nonono”. Ingrid y la abuela la han visto jugar en el patio con la maestra y con los otros niños. No suelta su muñeca (El nené), todavía no le acepta comida a la maestra, pero poco a poco les va teniendo mas confianza.

El colegio es un cambio grande, es una de esas cosas que te marcará de por vida, pero la única manera de saberlo es verlo como padre, desde afuera. Ana siempre ha sido una niña muy pegada a la mamá, quizás por eso la separación diaria es un golpe fuerte para ambas. Sabemos que estamos haciendo lo correcto, Ya la casa y la familia no eran suficientes para que Ana creciera, su mundo debía expandirse y el colegio era la mejor alternativa, la otra era un hermanito, pero por ahora pasamos.

Para mi ha sido difícil, incluso deprimente no poder estar ahí. Este es un paso importante en la vida de mi hija, se que ella no lo aprecia aún, pero como padres, Ingrid y yo, sabemos que es en el colegio donde adquirirá gran parte de sus habilidades sociales y de las herramientas que serán base en su vida. Para Ingrid tampoco ha sido fácil, mis dos chicas han estado juntas desde siempre, nunca se han separado, y ahora, estas pocas horas que Ana está en la escuela, a Ingrid se le hacen infinitas. También ha llorado, se ha sentido traidora y mala madre, pero también se siente contenta y buena madre porque tiene la oportunidad de darle educación a Ana. Si, los sentimientos son encontrados, pero al final ganará el sentido común. A ambos nos duele que Ana llore cada mañana y Anita parece que se da cuenta y se aprovecha. Al salir del colegio, cuando la van a buscar, quiere que la consientan mas, cómo si hiciera falta!!!

Ana empezó la escuela, tiene año y medio y ya me la puedo imaginar caminando de la mano de su mami entrando al colegio, con su lonchera cruzada al hombro y su muñeca en la mano libre. A esa edad se hacen amigos instantáneamente y se olvidan con la misma facilidad. Me la imagino pintando con los dedos o cantando o bailando o escuchando algún cuento sentada en el piso con los otros niños, la veo jugando en el parque del colegio o haciendo educación física, feliz de tener cada día mas actividades, pero con un ojo puesto en la puerta esperando que llegue mami o la abuela a buscarla.

Felicidades hija preciosa, hija amada. Mucho éxito en tu escuela, apenas estás empezando y te faltan muchos días entre compañeros, amigos, maestras, pupitres, libros y cuadernos. Esperamos tener la oportunidad de darte la mejor educación que podamos, no sólo en las escuelas que escojamos para ti sino en casa también. Mucha suerte ahora que empiezas tu vida escolar, te deseo que hagas muchos buenos amigos y que aprendas mucho, se que eres la niña mas inteligente del universo, pero no sabes la inmensidad de cosas que te faltan por aprender, y a nosotros de aprender de ti. Espero acompañarte siempre que vayas a la escuela, por ahora estoy en tu corazón y tu estás en el mío, pronto te veré otra vez y volverá mi corazón a latir.

Te amo hija, aprovecha y disfruta tu escuela

Alv

Baires o Madrid?

Acabo de adquirir el nuevo cd de Fito, salió a finales del año pasado y por cosas del destino no lo había comprado aún, pero, y ya que tengo la colección completa, ayer decidí cubrir esa falta.

La presentación es la que ya se viene volviendo habitual en muchos músicos para discos en vivo, un cd y un dvd con el concierto.

“No se si es Baires o Madrid”, título de este disco, es un compilado de un concierto realizado el año pasado en Madrid, en el Palacio de los Congresos. Fito se presenta solo con su piano, algunos músicos invitados lo acompañan en algunas canciones. Destacan Joaquín Sabina, Pablo Milanés y Ariel Rot como los más conocidos en estas latitudes entre otros. El disco viene con 16 canciones, casi todas del propio Fito y cabe decir que es un buen disco. Merece ser la pena escuchado de principio a fin. Que nadie espere canciones nuevas, son grandes éxitos de la historia Paeziana, ya con treinta años de carrera en esto de la música y el rock.

Fito, que supongo ya sabe que alcanzó su zenit como compositor, y de hecho parece que ya va en bajada, se muestra en un concierto simple, un piano y lo que queda de su voz. Afortunadamente ya no intenta alcanzar tonos de sopranista ni mucho menos, quienes somos fanáticos de hace tantos años se lo agradecemos porque ya le es difícil forzar la voz. En el aspecto musical Fito nos permite redescubrirlo como un excelente pianista. Los arreglos musicales son muy buenos, tampoco se puso a reinventar temas pasándolos a piano cuando son obviamente para grupos de varios instrumentos, lo cual se agradece también.

Voy a hacer un repaso rápido canción por canción destacando lo que se pueda destacar y para que conozcan el contenido del disco:

- 11 y 6: el gran clásico de Fito Páez. No hay mucho que decir de esta canción, es excelente. Ya Fito la había interpretado múltiples veces acompañado únicamente con su piano y esta vez nos permite disfrutar de una excelente versión.
- Tumbas de la Gloria: nuevamente a solas con el piano, Fito deja de lado los adornos vocales, la pone un tanto mas lenta que la original de “El amor después del amor” y no le queda mal, no es la mejor del disco, pero es uno de esos temas que se han vuelto imprescindibles en la discografía de Fito
- La Rueda Mágica: Otro de esos temas buenos, Le acompaña Pereza, un grupo español que merece ser escuchado con mayor atención en voces e instrumentos. Buen arreglo vocal.
- Eso que llevas ahí: se nota que a Fito le gusta esta canción. No es mala, y la interpretación en piano suena bien. Es una de esas canciones en las que extrañas la batería al menos y el piano en los dedos de Fito intenta superar esa falta
- El amor después del amor: Fito y su piano intentan, casi con éxito a mi manera de ver, reinterpretar una obra muy dinámica. Es uno de los temas en donde se destaca como pianista
- Dos días en la vida: lo acompañan Diego del Morao (guitarra), Dani Noel (bajo) y Sabú (cajón). Hubiese quedado perfecta con una segunda voz, femenina para mas impacto, pero creo que Fito pretende deslindarse de su pasado musical y de sus arreglos orquestados y multivocales, pero la incorporación de los instrumentos le da un toque especial dentro del contexto del disco
- Contigo: la única canción del disco que no fue escrita por Fito. Aquí debo advertir que soy un gran fanático de Sabina, y ya resulta obvio que ambos se han reconciliado, no sólo con ellos sino con sus seguidores. Joaquín Sabina es la segunda voz de una excelente interpretación. Ambas voces suenan muy bien y debo decir que este tema es de mis favoritos en el disco, insisto que esa apreciación se puede deber mas a la influencia de Sabina que a la interpretación misma, aunque no lo creo
- Brillante sobre el mic: Me gusta, la canción me ha gustado desde la primera vez que la escuché hace ya tantos años (17 casi). No es la primera ves que la escucho solo en piano y como siempre, quizás es la mejor manera de interpretarla
- Yo vengo a ofrecer mi corazón: con Pablo Milanés. Una canción requetearchiconocida y mil veces interpretada. Recuerdo haberla escuchado hasta por el Orfeón Universitario de la UCV. Suena bien, a pesar del tiempo, Pablo sigue conservando aún una buena voz. Fito lo hace excelente en el piano
- Giros: Otro de esos temazos en el disco. Fito en el piano y Ariel Rot en la guitarra ejecutan una excelente versión. Como nota adicional, este fue el primer tema de Fito que escuché y el que hizo que me convirtiera en fanático
- Al lado del camino: un tema que gana mucho en esta versión. Fito y el piano, no hace falta nada mas. Otro buen tema, de un buen disco, que no podía dejarse por fuera. Escuchando esta canción uno no pude dejar de pensar que Fito debería ser siempre así
- Un vestido y un amor: la mejor. Es imposible negarlo. Fito en piano y como segunda voz, la principal se la deja a Gala Evora, una voz impresionante que se acopla impecablemente a la lírica excelente de este tema. Si no quieren escuchar el disco, por lo menos traten de escuchar este tema. Si eres medio fanático, por este tema vale la pena el disco
- La rumba del piano: nuevamente lo acompañan Diego del Morao, Dani Noel y Sabú. Nuevamente debo decir que es uno de esos temas que le importan mas a Fito que a sus seguidores, bueno al menos a mi. Si no hubiese estado en el disco no la habría extrañado. No es que esté mal, suena muy bien, pero no es de mis favoritas, ni en el disco ni en todas sus canciones
- Pétalo de sal: Agradezco a Fito que le haya dejado la voz a otra cantante, Marlango. Es un tema que tiene tonos agudos y en voz de Fito ya no suenan tan bien, y quitarlos de la canción es como asesinarla un poco. La voz de Marlango no es excepcionalmente bella, pero puedo decir que es un tema que me gustó.
- Dar es dar: ya terminando el concierto, Fito nos da un tema que originalmente fue escrito sólo para piano. Marlango, Pereza, Gala Evora, Ariel Rot, Mavi Díaz y Coki lo acompañan en los coros y algunos instrumentos. Es mas una canción entre panas acompañada por el piano. Me gusta el tema, y la versión queda bastante bien. Destaca la guitarra de Ariel, como es usual
- Mariposa Tecknicolor: Fito insiste en tocar este tema solamente con el piano, no es la primera vez, hay que recordar que ya lo intentó en “Moda y Pueblo”, aunque debo decir que en vivo le quedó mucho mejor

Ese es el cd, en el dvd, que aún no he visto, vienen además otras cuatro canciones:
- El cuarto de al lado
- Creo
- Ciudad de pobres corazones
- Y dale alegría a mi corazón

Será interesante ver Ciudad… a ver cómo queda interpretada al piano solamente.

Cualquier fanático de toda la vida de Fito, como yo, puede extrañar temas como: Polaroid, B’ode y Evelyn, Cable a tierra, Ambar Violeta o Bello abril, y quizás alguna de ellas hubiese quedado perfecta en el disco, pero tampoco es que esté malo. Se agradece que discos como “Rey Sol”, “Rodolfo” o “El Mundo cabe en una canción” casi no estén presentes, y es que hay que estar claros que los mejores días como compositor de Fito parecen haber pasado. Supongo que la vida fácil, la fama y haber dejado las drogas duras, amén de que ya ha superado los grandes traumas de su vida personal y amorosa, aunado al hecho de ser padre lo han puesto un poco mas “blando” podría decir. A veces se extraña la dureza de “Ciudad…” o de “Ey!” pero que le vamos a hacer, seguiré comprando sus discos a ver si algunas vez podemos volver a escuchar el Fito apasionado y oscuro que alguna vez fue.

En conclusión, debo decir que el disco es muy bueno. Si les gusta Fito traten de buscarlo en Internet para que lo oigan y decidan si lo quieren comprar. Nuevamente, no esperen temas nuevos ni rock duro. Es sólo Fito, como si estuviera en la sala de su casa, tocando música con unos panas un domingo en la tarde. Si quieren lo pueden ver como el Unplugged que MTV nunca le propuso.

A mi me parece que vale la pena tenerlo, así a lo mejor uno se ahorra ir a algún concierto. Pero cada quien es libre de comprarlo si le parece.

Saludos

Alv

PD: volví…