El vino toma Caracas / Caracas toma vino

El monte Olimpo estaría de fiesta y Dionisio de plácemes por la fiesta del fin de semana pasado en el Centro Comercial San Ignacio. Desde el jueves y hasta el sábado se llevó a cabo en ese sitio “El Vino Toma Caracas”, organizado principalmente por la gente de “La Viña del Señor”.

Mas de 30 empresas distribuidoras de vino en Venezuela tuvieron la oportunidad de mostrar lo mejor de sus repertorios, lo mas selecto y lo mas vendido (vendible) de sus importaciones. Había vinos de Chile, Venezuela, Argentina, España, Portugal, Italia, algunos de Francia y también algo de Sudáfrica y Australia.

Esta es la segunda edición del evento y la primera en que se realizan catas dirigidas sobre diferentes tópicos. Vladimir Viloria, Miró Popic y el experto argentino Miguel Brascó comandaron algunas de estas catas, de las cuales se hicieron mas de 20 de las 30 planificadas inicialmente. Por obvias razones de hora hubo muchas en las que no hubo quórum suficiente así que tuvieron que cancelarlas. Es una lástima porque yo quería ir a la de vino rosado… L

A fin de disfrutar esta toma como se debe, pedí en la empresa dos días de vacaciones y mi flaca hizo lo mismo. Así podríamos ir a las catas y a los stands sin llegar tarde y sin estar apuraditos. Una idea excelente y a mi parecer justificada, pero causó mucha sorpresa entre mucha gente que conozco y que conocí en el evento. No se, a mi me parece bastante obvio que si quieres disfrutar de algo como esto tienes que dedicarle tiempo, buscar las catas que te llamen la atención y que tu bolsillo permita y tratar de hacerlas, no importa la hora, es la filosofía tras las vacaciones de esos dos días. De las 30 catas propuestas nos anotamos en las siguientes:

• 2.- Por amor al patito feo: Desagravio al vino rosado
• 9.- Del cerdo hasta los andares: Elogio al jamón
• 10.- Oportos Tawny 10, 20 y 30 años
• 21.- Los top 100 de Wine Spectator
• 30.- El menú navideño de Armando Scannone: Ejercicio de degustación de alianzas entre platos y vinos
  

Hablaremos un poco en detalle de cada una de ellas, pero es justo iniciar el relato de manera cronológica desde el jueves.

Ese día, en la mañana me llamaron a mi celular de parte de los organizadores del evento para decirme que en la cata correspondiente a ese día en la tarde, la del vino rosado, no se había juntado suficiente quórum así que no iban a abrirla, de hecho los únicos inscritos éramos mi flaca y yo. Una verdadera lástima, pero que nos podían anotar en otra cualquiera del mismo horario. Las opciones eran: “Tres vidueños blancos” y “Expresiones del Malbec en la Argentina”. Ambas llamaban la atención, la segunda en particular porque era dirigida por Miguel Brascó del Programa el Buen beber del canal por cable Gourmet. De todas maneras, como ya anteriormente habíamos hecho una cata de Malbec argentino, nos decidimos por la del vino blanco, a la misma hora, a las 3 de la tarde.

Llegamos al sitio con un poco de antelación y al acercarnos al escritorio técnico, nos informaron que esa también la habían cerrado por falta de quórum, un par de personas se habían retirado, con lo que no se cumplía el mínimo necesario. Nos podían incluir en la de los Malbec, o podíamos elegir otra mas tarde. Vimos el cronograma para el día y apostamos por una que sonaba muy interesante: “¡No te arruines!: Cata a ciegas de los mejores vinos en Venezuela hasta los 30.000 Bs”, a las 5:30 pm.

La cata se inició un poco tarde bajo la excelente conducción de Miró Popic, un chileno (había que mencionarlo) gran conocedor de vinos y comidas. Nos sirvieron 4 copas, algunas muy buenas y otras que no me gustaron tanto. Al final mi favorito fue un Malbec Altos las Hormigas 2005 que se colaba muy bien. Otro buen vino fue uno portugués llamado Charamba 2004, del valle del Douro.

Empiezo a ver que estas catas vienen a mostrar dos cosas primordialmente: 1) que uno es un absoluto ignorante en muchas materias, 2) que es necesario probar otros vinos para encontrar buenos caldos (como dirían los entendidos)

A las 8 de la noche estaba pautada la cata de jamones, menos mal que no la movieron mucho ni la cancelaron. Fue un verdadero espectáculo jamoneril, luego de una interesante charla dictada por Alfonso Limés, que incluyó un paseo por el proceso de preparación de jamones curados, nos sirvieron 6 muestras de jamones diferentes, incluyendo dos venezolanos. Es increíble la inmensa diferencia de sabores entre ellos, a pesar que se preparan similarmente. Mi preferido fue el Parma, jamón italiano nada salado, con ciertos toques de dulce que es excelente. La charla culminó con la cuña gratuita (que esperaban) de la tienda del expositor: Guardaviñas, en Prados del Este, donde pronto iremos a probar otras delicias de este tipo.

El viernes nuevamente teníamos una cata a las 3 de la tarde, esta vez era la de los Oportos, nuevamente dirigida por Miró Popic y David algo (sorry, no escuché el apellido, pero es representante de los oportos Barros que probamos). Es increíble lo bueno que es el oporto, un vino dulce de excelente factura. Y es notorio como gana en sabor y en textura con el paso de los años. La charla que acompañó la cata fue mas que educativa, por poner un ejemplo, el Oporto, no se hace en Oporto, ni se embarca desde ese puerto portugués, ni siquiera tienen nombres portugueses sino ingleses… ese es el tipo de cosas que se puede aprender en una cata de estas.

Esa misma tarde, un par de copas de los stands y en la noche a casita.

El sábado teníamos prevista a mediodía la cata de “Los top 100 de Wine Spectator”, pero por razones un tanto ajenas a nuestra voluntad, no pudimos llegar. Una verdadera lástima porque me dijeron que estuvo buenísima. Para no perder el dinero invertido, nos ubicaron en la cata de las 3 de la tarde: “No te arruines III: Cata a ciegas de los mejores vinos en Venezuela de mas de 60.000 Bs”

Nuevamente Miró Popic nos llevaría de la mano por los caminos de unos buenos tintos. 6 vinos diferentes, de diferentes países fueron la base de esta degustación. Si debo nombrar un favorito, indudablemente sería un Pinto Noir francés excelente. Con el toque exacto de frutalidad (o como se llame). Prometo poner el nombre aquí cuando lo consiga.

En la tarde, nuevamente, y para hacer tiempo, un buen paseo por los stands de las distribuidoras. Aquí debo hacer también unos comentarios. Desde hce muchos días estaba detrás de un vino surafricano, para probar algo nuevo. Finalmente lo probé, un Tribal Syrah 2004. Me pareció un poco soso, con falta de cuerpo y un poquitín dulce para mi gusto, y para ser un Syrah. En fin, un vino joven, que le falta tiempo, pero por lo menos me quité la espinita. Probé también un excelente Rioja español Crianza 2003 (no recuerdo el viñedo), que realmente es un muy buen vino, muy sabroso y con cuerpo como dicen los que saben.

La noche cerró con una excelente cena. Un menú navideño bajo las recetas de Armando Scannone y con los vinos propuestos por Vladimir Viloria, sirvieron para nosotros de cierre perfecto del evento. El pernil se deshacía en la boca y las hallacas, con un ligerísimo toque picante y dulce, estaban de lo mejor. Siempre se dice que las mejores hallacas son las de la mamá de uno, pero como mi mamá no prepara muchas hallacas, puedo decir, sin culpa alguna, que las mejores hallacas son las de Scannone!

De verdad desde ya esperamos con ansias el siguiente, que sabemos estará muchisimo mejor que este, y al igual que en esta ocasión esperamos poder disfrutarlo en compañía de los buenos amigos. Desde aquí mis sinceras felicitaciones a todos quienes hayan trabajado en el evento, como maestros de catas o desde la organización. Nuestras congratulaciones a “La viña del Señor” por una excelente idea y una muy buena planeación y ejecución. Y sobre todo, gracias por hacer algo como esto posible en Caracas, si algún día lo ponen en Los Altos Mirandinos, muchísimo mejor. Por cierto, por ahí se oyen ruidos de que vamos a preparar nuestra propia cata, a ver cuántos se animan...

Seguiremos informando

Alv

¿Cuándo empieza Navidad?

Cada año es la misma pregunta: cuál es el día, la semana o el momento en que se puede decir que ya estamos en Navidad? Cómo sabemos que realmente el espíritu navideño se debe apoderar de nosotros? Cuándo comprar los regalos? Y sobre todo, el leit motiv de esta nota, cuándo se debe poner el arbolito?

Navidad, como la define el diccionario refiere a la celebración por el nacimiento de Jesús, es decir que no se debería tomar como celebración ningún día antes, a menos que uno sea medio sádico y celebre el sufrimiento de José y María, la trágica y desesperante búsqueda de alojamiento o las penurias de la labor de parto, que me imagino que a pesar de ser hijo de Dios, sigue siendo un parto, y para esa época no había anestesia, y por lo que he escuchado la fe mueve montañas, pero difícilmente evita los dolores de las contracciones. En realidad el diccionario dice que Navidad va desde la celebración de la Natividad hasta Reyes.

La extendidísima costumbre de hacer regalos y adornar las casas por estas épocas prenavideñas (si nos atenemos al DRAE) proviene de hace unos 150 años atrás. El famoso arbolito y las tarjetas son costumbres europeas y San Nicolás proviene de una costumbre extendida por los Estados Unidos basada en leyendas e historias Europeas también. Hasta aquí aún no se menciona, en bibliografía alguna, la fecha de inicio de la Navidad. Es justo (y culto) recordar que el 25 de diciembre, día de Navidad, fue establecido en el siglo IV por orden del Papa Julio I ya que en realidad las escrituras no mencionan en ningún lugar la fecha real de nacimiento de Jesús. La fecha fue escogida para ajustarse al calendario de fiestas paganas que ya existían, de esta manera era mas fácil introducir la religión porque se podía ir asociando un evento religioso con las fiestas y celebraciones que ya existían, así se va acostumbrando y ideologizando al pueblo mismo (suena familiar?).

Volviendo al punto, estamos en la búsqueda de una respuesta para saber cuándo se debe montar el arbolito navideño. Esta necesidad surge bajo presión de la flaca (mi esposa) que, si de ella dependiera, adornaría la casa desde inicios de noviembre. Ha sido duro tratar de extender esa fecha hasta diciembre, pero lo mejor es hacer un compromiso y adornarla a mediados de noviembre. Pero volveremos sobre esto mas adelante.

Vamos a hacer un repaso de las posibles fechas para marcar el inicio de la navidad, al menos en Venezuela:

- Cuando se oye la primera gaita
- Cuando abren las tiendas especializadas en Navidad de la Panamericana
- Cuando los centros comerciales adornan sus instalaciones
- Cuando te pagan utilidades
- Cuando la vecina pone su arbolito
- Cuando en la oficina empiezan a jugar Amigo Secreto

Ahora voy a retar y argumentar cada una de ellas para luego fijar mi posición (para lo que vale) respecto al inicio de la Navidad:

“Cuando se oye la primera gaita”: no es un argumento válido porque una fecha lógica debería ser aplicable a todo el país y estamos claros que los maracuchos oyen gaita todo el año (no me pregunten porqué, yo tampoco los entiendo). Además en cada ciudad hay una radio, generalmente mala, que durante todo el año mantiene un programa de gaitas, que casi siempre se llama “Gaitas todo el año”. Los grupos de gaita empiezan a ensayar en marzo o abril más o menos, me imagino que para ver si al final de año la gaita suena bien, pero no, eso no pasa nunca. Como último argumento, las gaitas empiezan a extenderse por la radio a nivel nacional mas o menos en septiembre, o sea 5 meses antes del día de Navidad!!!

“Cuando abren las tiendas especializadas en Navidad de la Panamericana”. Otro argumento que no funciona porque, en vista de la situación del país en los últimos años, estas tiendas van abriendo cada vez más temprano en el año cada año. Esta vez abrieron a finales de octubre, cuando el año anterior abrieron a mediados de noviembre y hace unos tres años abrían empezando diciembre. Cómo puede ser este un buen parámetro si de aquí a tres o cuatro años estas tiendas estarán abiertas todo el año vendiendo cualquier cosa?

“Cuando los centros comerciales adornan sus instalaciones”: Por razones comerciales y mercantilistas, cada año los centros comerciales adornan sus instalaciones más temprano. Antes, hace muchos años, uno podía ver un pinito y unas guirnaldas en un centro comercial ya en diciembre, pero ahora, para atraer más clientes, empezando noviembre adornan todo, las tiendas adornan sus vidrieras y los centros comerciales compiten entre ellos por el árbol más grande y la mayor cantidad de lucecitas. Si no hay una fecha fija y cada vez mas la tendencia es a adornar en noviembre, cómo podemos tomar eso como referencia?

“Cuando te pagan utilidades”: Este podría ser un buen argumento, pero cada empresa paga, al menos las que pagan, sus utilidades en diferentes días, tendríamos que para cada persona habría una fecha diferente de inicio de Navidad. Este año a los empleados públicos les pagaron a principios de noviembre, a mi me pagaron utilidades hace una semana y a la Flaca se las pagarán el 24 de diciembre. Si usamos esto como parámetro para el inicio de la celebración, la Flaca tendrá una Navidad muy corta…

“Cuando la vecina pone su arbolito”: Eso no vale porque es simple y vulgar envidia. Cada señora del edificio va a querer ser la primera en poner luces y adornos. De hecho creo que todos hemos visto desde hace un par de semanas que en muchos apartamentos hay ya luces navideñas (pero todavía faltan dos meses!!!!)

“Cuando en la oficina empiezan a jugar Amigo Secreto”: Esto es tan absurdo como todas las anteriores. Qué pasa con la gente que no participa del juego? Yo soy uno de los que no juega Amigo Secreto, no me gusta jugar eso. Y se, de buena fuente que hay empresas en las que no se juega. Entonces, y sabiendo que las mujeres que organizan esos jueguitos, desearían empezarlo mas o menos en marzo, tendríamos una Navidad de 9 meses? No es lógico.

En fin, cada argumento que se suele decir para marcar el inicio de la Navidad deja de ser válido por ser altamente subjetivo y maleable en el tiempo. Yo creo que deberíamos poner una fecha fija para el inicio de las celebraciones Natividades. Me gustaría proponer el 1° de diciembre como fecha única por ser el inicio del mes en el que se celebra el nacimiento de Cristo, pero se que eso puede chocar con mucha gente porque ya para cuando llegue diciembre, debes tener el espíritu navideño y tener tu casita ordenada y adornada, de manera que mas o menos el 15 de diciembre ya tengas regalitos debajo del árbol (o en el nacimiento si es el caso), aunque sabes que vas a estar hasta el último día comprando los regalos de la gente más cercana, los más importantes. No se porque pero siempre es así.

En fin, para complacer a todos, en especial a mi Flaca, aquí y ahora decreto que la Navidad va a comenzar el día 25 de noviembre de cada año. Es la fecha ideal, no es tan temprano y aún no es diciembre. Ya hay gaitas y está todo adornado en todas partes, y además ya venden los ingredientes de las hallacas, es la fecha ideal para poner el arbolito navideño y el nacimiento en la casa, para mover muebles, pintar, botar cosas, arreglar el maletero y poner lámparas y esas cosas normales que se le ocurren a las esposas. Además te da todo un mes para pensar en qué comprar, y por supuesto en comprarlo de una vez, no vaya a ser que se acabe y te quedes sin regalo y estés corriendo el 24 en la tarde para ver donde compras de última hora cualquier cosa para salir del paso.

No, ahora no, oficializando el inicio de Navidad un mes antes, tendremos tiempo de sobra para hacer todo y para planificar todo. Es la fecha ideal, aunque vamos a estar claros que lo que uno idea no siempre se cumple. Me toca, este fin de semana, el 18 de noviembre para ser mas precisos, sacar el arbolito, mover unos muebles, arreglar las luces y seguramente comprar adornitos para poner el árbol una semana antes de lo que yo quisiera, pero espero que con los argumentos expuestos aquí, el próximo año si nos atengamos a mi sugerencia… espero.

Saludos

La esperanza de los tequeños 3: Las fotos

Para completar la serie sobre el Metro de Los teques, algunas fotillos, en mi muy peculiar estilo de tomar fotografías:

-Esperando en Las Adjuntas, nótese la cantidad de personas en la misma situación:

- Una vez llegamos a El Tambor, hay que hacer la respectiva cola para salir:

- Y mientras esperamos, vemos al tren irse otra vez a la capital del país:

- Por último, un par de fotos de lo que será la imagen mas importante en mi futuro como usuario del sistema:

En fin, queda entonces un breve registro visual del Metro, en realidad había tomado muchas mas fotos, pero ni la cámara es tan buena ni yo tan buen fotografo así que por ahora es mejor conformarse con lo que hay.

Saludos

La esperanza de los tequeños 2: El regreso

Al igual que sucede con algunas películas malas, esta historia también tiene una segunda parte, y al igual que su contraparte fílmica, recibe el mismo nombre: “El Regreso”. En mi caso no se trata de monstruos o alienígenas que regresan de una pseudo muerte para atacar de nuevo a los tranquilos habitantes del más acá, no nada mas alejado de la banal y simple realidad de este relato. Aquí solo hablaré de la experiencia de regresar a mi casita usando el sistema Metro por primera vez.

Se inicia este cuento a las 4:30 pm, hora fija de mi salida al finalizar mi labor diaria. Efectivamente, desde las 4:28 venía preparando todo, cerrando los programas, guardando el iPod, buscando las llaves y el ticket de metro, de manera de que a las 4:30 en punto (sharp dirían los gringos) estaba cerrando mi oficina y dirigiéndome a la salida. 4 minutos después salía del edificio a enfrentarme a la vorágine mercaderil que es el Boulevard de Sabana Grande. Esos cuatro minutos que tarda cualquiera desde su oficina a la salida a la calle, esos minutos que toma el camino al ascensor, un breve “chao, hasta mañana” y el eterno e insufrible lento ascensor, que como trabajo en uno de los pisos mas altos de la torre, tiende a pararse casi en cada piso (aquí cabría una referencia al viejo clásico del autobús San Ruperto, pero no estoy seguro que todo el público sepa de qué hablo así que mejor me la guardo).

Mi plan era bastante simple: caminar desde la oficina, en Sabana Grande, hasta la Estación Zona Rental, en Plaza Venezuela para tomar el tren desde ahí directo a Las Adjuntas y hacer el trasbordo para tomar el metro hasta Los Teques, un plan bastante sencillo afortunadamente, porque así ha menos posibilidades de que algo salga mal.

Luego de caminar por 11 minutos por el medio del Boulevard (o lo que los buhoneros han dejado de él), llegué a mi primer punto de control, el Metro de Zona rental. Si, a las 4:45 entraba a la estación, ticket en mano, pero Murphy ya preparaba sus cuchillos para atacarme. El ticket no funcionó. Ignoro la razón, lo intenté en dos torniquetes (los únicos dos que permitían entrar a la estación) y no funcionó. Hice lo obvio, compré otro. Suelo comprar Multiabonos porque es la manera más sencilla e inteligente de ahorrar tiempo en el sistema. En fin, a las 4:51 arribó el tren, porque debo decir que al bajar apurado las escaleras al andén, alcancé a ver como se iba el tren, despidiéndose de mi en su rápida carrera, así que me tocó esperar un poco. Cuatro minutos después mientras se superpoblaba el vagón, arrancamos. El viaje bastante normal para el trayecto, nada especial que comentar.

31 minutos después (a las 5:25pm para que no saquen cuentas) llegamos a la estación Las Adjuntas. Dos minutos después ya estaba haciendo cola frente a lo que debía ser una entrada al tren, pero no estaba el tren. Al parecer hacía pocos minutos que había salido así que habría que esperar un poquito. Aquí, una aclaratoria innecesaria. El sistema Metro Los Teques fue inaugurado un poco apresurado, por las razones conocidas por todos, vamos que sabemos que votos son votos aunque sean a juro. El hecho es que está funcionando una sola vía, por lo que sólo puede transitar un tren en el recorrido, el mismo o sube desde caracas a Los Teques o baja en dirección contraria. Si cada viaje son 15 minutos aproximadamente, mas el tiempo que pasa el tren parado en cada estación, tenemos que entre tren y tren pasan unos 35 – 40 minutos. Pues bien, yo llegué cuando el tren iba en ascenso, por lo que tuve que esperar que llegara a El Tambor, cargara pasajeros y bajara. 24 minutos de espera, larga, tediosa y apretujada espera. A las 5:51pm arribó el tren a la Estación, el impulso frenético de la gente desbordada me llevó directo, casi sin caminar, al centro del vagón, donde me quedé el resto del viaje. A las 5:54 salimos en dirección Miranda, dejando atrás la capital del país.

Mi primer viaje, viniendo de Los Teques a Caracas fue hecho casi en la totalidad de la oscura madrugada, cuando el Sol aún dormía allende el horizonte, así que no se podía ver nada por las ventanas lo que me indujo a pensar que todo el viaje era por túneles. Pero en el viaje de regreso me pude percatar que casi un tercio del viaje se hace a cielo abierto, a plena luz del día, admirando los gloriosos paisajes de la carretera vieja (vuelven aquí las sonrisas sarcásticas del autor).

A las 6:10pm llegó el tren a la capital de Miranda, lo cual constituye casi un record histórica en viaje a través del espacio interestatal. Realmente no está nada mal eso de llegar de la oficina a El Tambor en 1h 40m. Pero la odisea no acaba ahí…

Si bien en ese instante de felicidad aún se podía ver luz de sol iluminando el cielo, algo pocas veces visto por mi allá en Los Teques, todavía quedaba un buen trecho por recorrer para llegar a mi casa.

Vivo en la Urbanización Santa María, km 24 de la carretera Panamericana. Sin colas, en carro eso queda a 7 minutos de la estación del Metro. Pero enfatizo eso: “Sin colas, en carro”.

Me toca admitir ahora, que a pesar de tener mas de 3 años viviendo en la zona, y en vista que por lo general me muevo en carro, desconozco bastante las rutas de transporte público que hay en la zona. Sé que junto con el Metro, pusieron 3 líneas nuevas, que parten y llegan a la estación. El detalle es que la línea Azul, va a Carrizal, la Roja va al centro de Los Teques y la Amarilla viaja hacia la zona de la carretera vieja. Es decir, ninguna de ellas ni siquiera me acerca a mi casa. Eso es un problema, y es el instante justo en el que el problemometro (vulgo, peometro) empieza a subir: “Ay coño!”

Conociendo lo que conozco busque un carrito que dijese algo como: Los Nuevos Teques, La Macarena, Gobernación o cualquier cosa que sonara cerca de la casa. Lo único que pasó por ahí, es una camioneta que decía “San José / El Vigía / Gobernación”, que en teoría me deja como a 10 minutos de mi casa si voy caminando. Fue la elección obvia, en vista que desde el Mero a la Gobernación hay menos de 10 minutos. El detalle es que no sabía, por inexperiencia, torpeza, ignorancia (o el adjetivo que mas le provoque) que para llegar a la Gobernación, debía pasear por San José y el Vigía, lo que en realidad tomó media hora. En conclusión, llegué a la Gobernación a las 6:45pm y a mi casa a las 6:53pm, caminando.

Veamos los numeritos:
Tiempo total: 2h 23m
Tiempo de viaje en sistema Metro: 47m
Tiempo en carrito, paseando por Miranda: 30m
Tiempo estimado, sin esperas y tomando el carrito adecuado: 1h 40m

También debo agregar que es posible ganar un par de minutos caminando desde la oficina a Zona Rental, si tan solo me voy por la Av. Casanova, donde hay menos gente y casi no hay buhoneros que estorben. De ser así, podría tomar el tren que sale un poco antes desde esa estación y llegar unos minutos antes a Las Adjuntas, por lo que quizás estaría tomando el tren que sale antes del que yo tomé, es decir que salga mas o menos a las 5:20pm, con lo que llegaría antes de las 5:40pm a El tambor y como máximo 20 minutos a mi casa, a las 6:00 pm podría estar allá, claro eso si todo sale perfecto como en el plan y se alinean 5 planetas mientras cae granizo y hay una estampida de elefantes y una pequeña cebra…

El sistema tiene gran futuro, especialmente para poder dormir un poquito mas. Mi estimado es que podré dormir cuando menos media hora extra todos los días, lo cual, créanme, es una ganancia enorme. Faltan cosas, no solo a nivel de sistema de trenes, sino a nivel de gente, como es posible que en un modulo de un vago, con 16 puestos, vayan 6 mujeres sentadas y 10 hombres, cuando había, en el mismo espacio, 11 mujeres de pie, una de la tercera edad, una con un niño pequeño y otra con un paquete grande. En fin, lo que falta es educación, pero eso no se compra en un ticket, eso se da en la casa, pero es que hay zagaletones que ni casa parecieran tener, no recuerdan que tiene una madre que podría estar en esa situación. Me imagino que son tan animales que son capaces de dejar a su propia madre parada con tal de ir sentados. En fin, ese comentario era solo para quitarme la ira.

Ya que comencé con un comentario fílmico, es justo que haga el cierre de la misma manera: “Nunca segundas partes fueron buenas”

Seguiremos informando

Saludos

La esperanza de los tequeños

No hablaré aquí sobre suceso gastrosociales de los referidos pasapalos mirandinos, no, nada mas alejado de ello. Esta entrada es para hablar de nuestro primer viaje en el Metro de Los Teques, obra recién inaugurada que permite la conexión entre la capital mirandina y la venezolana en apenas 15 minutos.

Si, es cierto, el viaje dura apenas 14 minutos desde la estación El Tambor hasta la estación Las Adjuntas. Los detalles técnicos de pendiente, distancia y curvas ya han sido expuestos repetidas veces en los medios así que aquí sólo voy a relatar la experiencia cronólogica del hecho, desde la salida de la casa hasta la llegada a tierras civilizadas y conocidas.

Por razones del destino, incierto y esquivo amigo, nos levantamos tarde esta mañana, pero realmente tarde, a las 4:47 am. Se que para muchos eso les parecerá extremadamente temprano, de madrugada, cuando aún es de noche, pero para nosotros y la inmensa multitud que vive por allá en las lejanías de los altos mirandinos, esa hora significa muy tarde. Por lo general me levantoa las 4 de la mañana, cuando ni los gallos empiezan a cantar, cuando los rumberos empiezan a llegar a sus casas, cuando uno debería dormir porque al sol le faltan dos horas para aparecer, a esa hora nos levantamos de lunes a viernes, todas las semanas. Bien, dejando atrás esa nota de envidia y tristeza, volvamos al relato.

Decía que nos levantamos muy tarde y que, dado que habíamos decidido viajar hoy en metro, hicimos lo mínimo necesario y salimos. Entre lo mínimo necesario está la preparación de las viandas para el almuerzo y sacar al perrito a que haga sus necesidades. Para hacer corto un cuento largo, salimos a las 5:23 am de la casa, Ya la flaca se había bañado y vestido y estaba lista para la oficina, yo por mi parte y para aprovechar el tiempo, salí tal cual me levanté (menos mal que anoche me puse un mono para dormir, porque por lo general duermo en ropa interior). En vista que no conocemos muy bien cuáles son las rutas de acceso a la Estación del Metro, decidimos esperar camioneta sentido Los Teques. A las 5:32 nos subimos a la camioneta y las 5:45 estabamos entrando a la Estación.

5:50 am, luego de hacer cola en el andén por cinco minutos logramos subirnos al vagón. Hay que aclarar que a esa hora ya la estación estaba totalmente llena de gente, pero hay personal pendiente que la gente no se colee y que esté ordenada. A pesar de la cantidad de gente presente no pareciera haber problemas, la gente está civilizada y todo funciona bien, esperemos que todo permanezca así ad infinitum. Los trenes están saliendo cada 30 - 35 minutos. Obviamente cuando el sistema funcione a su capacidad normal, los trenes deberían salir cada 5 ó 6 minutos, y además el tren deberá entrar en el sistema Metro de Caracas así que no habrá transferencia, pero me estoy adelantando al relato y al tiempo. Eso estará listo para el próximo año.

A las 5:52 arrancó el tren, que en su mayor parte viaja por túneles, lo cual es malo porque el exhuberante paisaje de la carretera vieja es digno de ser visto y disfrutado por todos (aquí el autor sonríe sarcasticamente).

14 minutos después, a las 6:06 llegamos a la Estación Las Adjuntas. Trasbordo al otro andén y nuevamente a esperar otro tren. Por los parlantes empiezan a anunciar que hay problemas en las vías y que el sistema tiene un fuerte retraso. No importa, ya estamos montados en el burro, ahora hay que arrearlo, de todas maneras seguimos lejos de nuestro destino. Llega un tren y nos subimos, parados y apretujados el tren no se decidía a arrancar. Finalmente, a las 6:26 se inicia nuestra travesía por la línea 2 del Metro de Caracas, iba lento el tren, seguían los avisos del retraso, pero finalmente, a las 7:02 el trencito llegó al final de la primera parte de nuestra travesía, la Estación Zona Rental en Plaza Venezuela. De ahí carrito a casa de mis suegros para bañarme y poder venir al trabajo aquí en Sabana Grande, donde finalmente llegué a las 7:40.

Tiempo total: 2h 17m
Tiempo total estimado, sin retrasos ni paradas en casa de los suegros: 1h 30m
Tiempo de viaje en sistema Metro: 50m
Usar el mismo tiempo si me voy en carro, pero no tener que calarme las colas: No tiene precio!

En fin, en el primer viaje, considerando los inconvenientes, me parece que la prueba fue superada con total éxito. Esta tarde viene la segunda prueba, el regreso desde la oficina a la casita. Luego les diré como fue eso, pero nuestra esperanza es muy buena. Esto viene a significar que cambiamos las colas por un viaje apretaditos en Metro, pero menos tiempo y sin manejar, que vamos, eso cansa cuando pasas 2 horas dentro de un carro rodeado por otros 2000 carros, por la Panamericana, oyendo a un idiota en la radio, en cualquier radio. Poco a poco el sistema irá mejorando a medida que la gente se adapte y se vayan terminando las obras, así que para el año que viene ya podré dejar de soñar con salir de Los Teques. Es mas se hará mas fuerte nuestro deseo de comprar una casita por allá arriba.

En fin, veremos que nos trae el futro.

Saludos

Fito en Caracas

Ayer 4 de noviembre se inició en el Aula Magna de la Ciudad Universitaria de Caracas la gira de presentación del nuevo disco de Fito Páez, “El Mundo cabe en una canción”. A las 7:30 de la noche entró Fito al escenario, vestido con Blue Jean, una camiseta amarilla con la imagen del “Sargent maravilla” y un saco Negro. Saludó al público que de pie lo ovacionaba mientras sus músicos se ubicaban en sus lugares.

Este fue el primer concierto de la gira que lo llevará por varios países incluyendo Europa, como el mismo ha dicho en días previos en entrevistas de prensa.

Saludó a los asistentes, a la ciudad, y arrancó con “Y dale alegría a mi corazón”, un buen tema para poner el ambiente de lo que sería un buen concierto. Continuó con “Eso que llevas ahí”, el tema promocional del disco nuevo, debo decir que no es mi tema favorito, pero el ritmo empezaba a calentar al público que coreaba el tema. El siguiente tema fue también muy movido, recordando viejos tiempos cantó “Yo te amé en Nicaragua” del disco “Tercer Mundo”, una excelente interpretación a mi entender.

La siguiente canción es de las viejas, como una manera de decirnos que el concierto daba para todo, que era una especie de revisión histórica. “Fuga en Tabú” de “Ciudad de pobres corazones” puso la nota lenta y depre del Fito ochentoso. Luego retomó el nuevo disco con el tema homónimo, en este punto se abrió el telón de fondo para mostrar un mural que representa el disco, que según palabras de Fito son imágenes de su Rosario natal, siguió con “Te aliviará” y “La hora del destino” del mismo disco. En esta última canción hay que decir que Páez se tomó su tiempo para explicar en detalle de qué iba la historia, no me pareció necesario el comentario pero vale haberlo escuchado. Al terminar “El mundo…” Fito se dirigió al Aula Magna y dijo “Tenemos disco nuevo, y nada, estamos componiendo y tocando, no queremos comer mierda de nadie”, palabras que arrancaron un nutrido aplauso.

Luego vendría un tema que por primera vez es interpretado en vivo en un concierto, a pesar de se uno de los favoritos de Fito (según él mismo) y uno de mis favoritos también: “La Verónica”, seguido por otro tema del mismo disco, “La Rueda Mágica”. Ya Fito no es lo que fue, la madurez se nota en sus letras y en lo que percibimos es su vida, pero la edad se le nota en la voz y en el manejo del escenario, ya no camina, ni se mueve como lo hizo antes, en los viejos conciertos del Poliedro, tampoco fuerza la voz para llevarla a octavas imposibles para él, ahora deja que los altos los haga uno de sus músicos, esta vez ni siquiera vino acompañado por una segunda voz femenina, sólo estaba Fito al frente del escenario rodeado por 4 músicos.

“Cadáver Exquisito” sería el siguiente tema, y para mi asombro fue muy coreado, menciono lo del asombro porque el publico era altamente variado, se podía ver una recua de niñitos de 15 años hasta señores que pasaban de los cincuenta todos en el mismo sitio. Luego uno de los grandes clásicos: “11 y 6”, coreada de pie por todoel publico. Una ovación muy merecida y los músicos se retiran, Fito queda solo junto al piano.

Pide silencio “si no me escuchan aquí no voy a estar en sus casas” dijo. Toca un excelente solo como introducción a un collage de buenos temas, un solo que nos demuestra que sigue siendo un virtuosos del piano, “La tumbas de la gloria” suena lento pero muy bien, seguido por parte de “cable a tierra” que nos recordó aquellos momentos en otros conciertos cuando yesquero en mano coreábamos ese himno a la locura de Charly. “Tus regalos deberían de llegar” y “Tu sonrisa inolvidable” fueron la continuación para cerrar con una emotivo “Un vestido y un amor”. El Aula Magna casi se cae con el publico voceando “te vi…” con los celulares encendidos… que será de la nube de yesqueros?

Volvieron los músicos y Fito se lanzo “brillante sobre el mic”, excelente canción y una muy buena interpretación. Se quitó el saco y explico que la imagen de la franela era quien le daba nombre a la siguiente canción “Sargent Maravilla”, y debo decir que me gustó mucho mas en vivo que en el disco. Continuó presentando el nuevo trabajo con “Te enloqueceré” para reanimar el publico presente nuevamente con ”Circo beat”, tristemente, todo el intro de la canción, aquel famoso: “buenas noches ladies and gentleman, bon soir…” fue totalmente grabado, ya Fito no puede dar altas octavas, al menos no tan altas, ya ni lo intenta. Con el publico totalmente de pie, inició “Naturaleza Sangre” para mantener al publico en movimiento. Luego, otro de sus grandes y épicos temas: “Ciudad de pobres corazones”, para cerrar con la clásica “A rodar mi vida”, solo que esta vez, en lugar de los miles de fans formando una marea de franelas en alto girando sobre las cabezas que se vio en el Poliedro hace años, ahora sólo unos cuantos, no mas de 10 o 20 personas lo intentaron. Tampoco el sitio se presta para eso. Luego se iría Fito

4 minutos después, con el publico de pie ovacionándolo y llamándolo, regresó Páez, con cambio de franela (se puso una negra) y tras dedicarle el tema a Caracas, cantó “Caminando por Rosario”. Fito dice sentirse a gusto con este público, que le tienen los pelos de punta y que siente que hubiese nacido acá, el aplauso no se hizo esperar y Fito respondió con “Dar es dar”, una buena versión, un tanto más lenta que la del disco, pero muy buena. Presentó a sus músicos y cerró la noche con “Mariposa Technicolor”. El público le dio una merecida ovación y se despidió.

Vale decir que fue un buen concierto, en mi muy humilde opinión yo le hubiera agregado “Polaroid de locura ordinaria “ y “Al lado del camino” para que quedara perfecto. Sin embargo salí contento, con el alma llena de Fito y con ganas de volver a escuchar los viejos temas. Si El mundo cabe en una canción, Fito cabe en un concierto, en este.